Quimbaya centenaria
Alejandría: antecedentes de su creación (I)


El entusiasmo despertado por la construcción del caserío de La Soledad tras la conformación de su Junta Pobladora el 27 de abril de 1914 y la protocolización de la compra del terreno en la Notaría de Filandia (Caldas) el 27 de mayo del mismo año ameritó que un mes después se solicitase al Concejo Municipal de Filandia su creación como corregimiento mediante el siguiente oficio petitorio suscrito por don José Ignacio Gutiérrez y 46 personas más:

“Señor Presidente del H. Concejo Municipal.
Presente.

Alejandría, junio 26 de 1914.

Los abajo suscritos, Colombianos y mayores de edad, vecinos de este Distrito, a Ud. y al H. Concejo que dignamente preside, con todo respeto manifestamos:
Como es sabido ya, hemos proyectado una población en el punto o fracción de La Soledad, proyecto que a todas luces tendrá su realización efectiva.
Contamos ya con un edificio para oficina de Corregiduría, el que siguiendo el progreso de la población llevará en pos su adelanto y perfección.
En vista de lo expuesto, pedimos al H. Concejo se digne decretar la erección del Corregimiento desde ahora.
La necesidad y la conveniencia son ostensibles, saltan a los ojos, ya porque al afluir pobladores se necesita una autoridad de mano hábil que los sepa uniformar en sociedad bien organizada, ya una mano fuerte que sepa coartar el libre empuje en sus disensiones y someterlos a la circunscripción demarcada y reglamentada por la ley.
Así pedimos y esperamos que el H. Concejo, interpretando nuestros intereses y conveniencia para el Distrito, creará el Corregimiento que solicitamos, o sea, se traslade el de Pueblo Rico.

Señor Presidente.

Firman:
José Ignacio Gutiérrez, Félix Mejía, José M. González S, Jesús M. Hoyos, Jesús M. Hernández V, Gonzalo Duque, N. Salazar, Manuel A. Vallejo, Francisco A. Hernández V, Jesús M. Hurtado, Ananías Ocampo, Marco Restrepo, Luis E. Echeverri, Jesús Ossa, Manuel D. Meza, Bernardino Meza, Manuel A. Toro, Jesús María Ramírez, Samuel Montoya, Pedro P. Vallejo, Pedro A. Hernández V, Juan E. Aguirre, Miguel Varón R, Próspero A. Ceballos, Roberto Grajales, Alfredo Arias, Francisco Buitrago, Rafael Arredondo, Ramón M. Ocampo, Nicolás Avellaneda, Lorenzo Marín, José Sandalio Echeverri M, Antonio M. Cifuentes, Nicolás Molina, Eugenio Duque, Leopoldo Valencia, Emilio A. García, Luis Beltrán, José J. Gutiérrez, Juan M. López, Aureliano López, Luis E. Salazar, José Ignacio González, Camilo Montoya, Francisco A. Ocampo, Juan B. N, Enrique Gutiérrez.”[3]

Es de reiterar que la solicitud de reconsiderar el Corregimiento de Pueblo Rico obedecía a que los límites que le fueron fijados comprendían el área entre los ríos La Vieja y Roble y la quebrada Buenavista, en la que prácticamente se albergaba una buena parte de los interesados en crear el nuevo corregimiento y al que inicialmente lo habían identificado como La Soledad. Además, en razón de que Pueblo Rico estaba más cercano al municipio de Montenegro, le convenía a Filandia una vecindad más próxima con el nuevo caserío para los efectos jurisdiccionales pertinentes.

Acompañando esta solicitud estuvo el mismo Ingeniero Miguel Varón, quien había sido contratado por la Junta Pobladora para efectuar el trazado del caserío, y que preparó el siguiente escrito:

“Señor Presidente del Concejo Municipal de Filandia:

Por su Honorable conducto quiero que la honorable Corporación, que Ud. dignamente preside, decrete la traslación del Corregimiento de Pueblo Rico a esta nueva y que será floreciente población.
Yo respondo de su importancia, respondo de su prosperidad, respondo para la oficina del señor Corregidor.
Creo, sin riesgo de equivocarme, que el personal más respetable de su Distrito está a favor de esta solicitud, como consta en una petición que se le incluye.
La moralidad irá a ser sin igual como es el ánimo de la H. Junta Pobladora, y para más, puede tomar el concepto del ilustre Párroco Francisco de Paula Montoya.

Alejandría, junio 27 de 1914.
Señor Presidente:
(Firmado) Miguel A. Varón”

En estos dos escritos aparece el nombre de Alejandría, que el ingeniero Varón propuso y que contó con la mayor aceptación entre los pobladores por encima del nombre inicial: La Soledad. Además, citó al Presbítero Francisco de Paula Montoya, que además de ser el Párroco de Filandia, era también socio de la Junta Pobladora y propietario de fincas con su familia, por lo que su testimonio era valioso para los intereses de los pobladores.

Por:
Hugo Galvis Valenzuela, Miembro de la Academia de Historia del Quindío (1)
Jesús Alberto Alzate Villegas, Licenciado en Ciencias Sociales e Historiador (2)
Gonzalo Alberto Valencia Barrera, Secretario Academia de Historia del Quindío


[1] Autor del libro: Quimbaya: La Tribu, La Fundación, La Ciudad; Editorial Quingráficas, Armenia, 1982.
[2] Autor del libro: Fundación de Quimbaya: Anotaciones para el estudio histórico de Quimbaya, período de la fundación y Corregimiento: 1914 - 1922; Impresora Comercial, Armenia, 1984.                                  
[3] Los nueve nombres subrayados pertenecen al grupo de los 51 pobladores que firmaron la escritura de protocolización de la compra del lote en el paraje de La Soledad y que fueron considerados como los primeros fundadores del actual municipio de Quimbaya.

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