Destacado médico, maestro musical y director, nacido en Manizales el 17 de enero de 1950; sus padres Alfonso Arboleda y Berlamina González, oriundos de Pacora y Aguadas, respectivamente, en dicho hogar nacieron siete hermanos: Guillermo, Marleny, Magnolia, Luz Mery- distinguida esposa del brillante médico salubrista Arnoby Chacón Cardona- Ubernel, Blanca Inés y Leonel.
Cursó sus estudios primarios en el colegio Nuestra Señora de Manizales y culminó su bachillerato en el Instituto Universitario de la hermosa capital de Caldas, en 1971. En la Universidad de Caldas recibió con honores el título de médico cirujano en 1979.
Contrajo matrimonio el 15 de julio de
1979 con la señora Luz Mary Ríos, actualmente residenciada en Estados Unidos,
en dicho hogar dos hijos: Ángela María, administradora de negocios; y Mario
Alejandro, diseñador gráfico, vive en Estados Unidos y actualmente es analista
técnico de inversiones en New Jersey, separado, comparte su existencia con la
médica Mónica González, un hijo Nicolás, estudiante de medicina en la
Universidad de Manizales.
Rumbo al Quindío.
En calidad de médico rural empezó a ejercer la profesión en Quimbaya de 1979 a 1980, se vinculó al hospital Sagrado Corazón como director hasta 1984, médico de los Seguros Sociales de dicha ciudad hasta 1990 y así mismo, atendió con solidez profesional su consultorio particular. Cercano en dicha época al médico samaritano y senador de la República Samuel Grisales, sin titubeos lo señala como su maestro y guía fundamental en su estadía en la bella ciudad cafetera y en su experticia como cirujano.
En el Instituto de Seguros Sociales
Después del estupendo ciclo laboral
en Quimbaya, continuó su labor profesional en el Centro de Atención Básica del
barrio Granada y más tarde en la antigua clínica San José, denominada para la
época Rita Arango Álvarez del Pino; con los años el ISS fue transformado y
finalmente el expresidente Uribe Vélez ordenó su liquidación como en efecto se
hizo, en 2003, privando al país de una valiosa institución de salud, una de las
mejores de América Latina.
Hospital mental de Filandia
Cirujano práctico excelente y amplio
conocedor de la polémica ley 100, desde 1995 puso en marcha su inclinación
científica por la siquiatría, la naturaleza humana y su reconocida vocación
clínica; para tal efecto, desarrolla en la sede San Juan Bosco, con mujeres
adolescentes, pacientes asistidos, jóvenes abrumados por el sufrimiento, una
vasta tarea paliativa y desde luego curativa.
Universidad Alexander Von Humboldt
Desde 2021 se desempeña como docente
de talleres en los semestres 7 y 8, aplicación de las patologías mentales a los
pacientes hospitalizados, una tarea pedagógica valiosa.
La música en el corazón
Muy joven se inclinó por la música y
antes de concluir su bachillerato recibió clases de piano con el profesor Noé
Salazar, armonía y solfeo en el Conservatorio de Música de la Escuela de Bellas
Artes de Manizales y piano complementario hasta 1979; en el Quindío en 1980, se
vinculó al Conservatorio de Música que dirigían los maestros Gonzalo Hincapié y
Rina Silva; en la actividad coral como integrante de la famosa coral Santa
Cecilia, que dirigió el maestro Bernardo Sánchez, símbolo de la famosa ópera de
Colombia, que dirigió Gloria Zea. Debo
señalar que Arboleda en Manizales fundó en 1972 y dirigió la Coral Brahms,
hasta 1979; actualmente la famosa institución está cumpliendo cincuenta años de
existencia. Con regularidad es director invitado.
Tertulias musicales
Participó con mucho entusiasmo en las
tertulias que lideraba Silvio Saldarriaga, con duración efímera por razones que
no es del caso mencionar; con María Teresa Mendoza, Germán Rodríguez, Olmedo
Jaramillo y Oscar Jiménez, creó la Coral Monteverdi, que dirigió con buena
regularidad hasta 1988.
Grupo vocal instrumental Discantus
Constituido en 1991 por la soprano lírica caleña Mariela Valderrama, con el bello nombre que viene de una expresión francesa de voces diversas de las primeras formas vocales, desde 1992 es dirigido por el maestro Leonel, hasta la fecha, 22 años sin interrupción de una magnífica labor, por lo menos con tres conciertos cada año, una tarea admirable de difusión musical y cultural, destacándose, entre otros, en la asistencia, tres veces , al Festival de Ginebra y la presencia en el grupo de respetables y conocidos artistas; 20 miembros a los cuales es necesario destacar y agradecer por su noble y abnegada tarea artística, su decidido empeño de difusión musical.
Para 2022 el grupo vocal está preparando La Misa Criolla, del compositor argentino Ariel Ramírez, en el mes de mayo, como reconocimiento especial a la vida y obra del maestro Bernardo Sánchez, quien ha sido director artístico de Discantus, durante varios años.
Con motivo de las próximas fiestas de
Armenia en el mes de octubre, presentará la famosa agrupación: Tertulia de
Antología Mexicana, con la colaboración del asesor musical, arreglista y
director adjunto Alejandro Ruiz Rojas.
¡Con las uñas!
Sin ningún apoyo oficial del ministerio de Cultura o de las organizaciones gubernamentales regionales, para su sostenimiento los integrantes deben “hacer vaca”, pagar sus propios gastos y ayudarse con los lánguidos ingresos que reciben por el ingreso a los conciertos; mientras Manizales, por ejemplo, tiene por lo menos 20 grupos corales, grupos orquestales, la orquesta sinfónica de Caldas, con la ayuda del gobierno, y una actividad musical esplendorosa, en nuestro medio, agrupaciones como la que comento, no cuenta con la mínima colaboración del Estado. Increíble. Sin embargo, a través de los años de funcionamiento ha cumplido un excelente papel difusor de la música y un maravilloso aglutinador de voces excelsas, dejando muy en alto a la región en el concierto nacional. Desde luego debo destacar como honrosa excepción, la existencia del Instituto de Bellas Artes de la Universidad del Quindío, que realiza una tarea encomiable.
Un hecho singular ocurrió el año
pasado, cuando el maravilloso Centro de Documentación Musical que dirige el
notable académico Álvaro Pareja y su señora esposa Martha Cecilia Valencia,
sufragaron la participación del grupo coral en la Cantata del Quindío.
Condecoraciones.
Recibió la medalla Mérito al Civismo, otorgada en 1985 por las Damas Voluntarias de Quimbaya; en la celebración de los 20 años de la Coral Brahms de Manizales en 1992, le fue entregado reconocimiento especial, por su condición de fundador y director invitado; el 1 de septiembre de 2019, por amor a su labor y activismo cívico, reconocimiento del Hospital Mental; ha recibido distinciones por su encomiable tarea artística y su formidable servicio a la cultura musical y a su promoción.
Autor del cancionero Vamos pal Sur, publicado en Manizales el 14 de septiembre de 1976, una recopilación cifrada para guitarra, introducción al folclore musical latinoamericano. Ha hecho numerosas adaptaciones corales para la agrupación coral Discantus.
Leonel Arboleda González se ha desempeñado en su vida profesional como
médico y músico excelso, una vocación de
servicio a la humanidad, con apostolado
y entrega total; afable y solícito con sus innumerables pacientes a lo largo de
su existencia, sin descanso continúa su labor humanitaria, en un núcleo humano
golpeado por el dolor y las secuelas del sufrimiento en una época de grandes
aflicciones; pero, además, con sentimiento patriótico, exalta con su
inteligencia y sus saberes, la producción musical colombiana y universal,
promocionando con pedagogía insuperable las voces nuevas y veteranas del canto
coral. Una labor que es necesario destacar por la admirable dedicación de
muchas horas de trabajo, sin ninguna retribución distinta que su indeclinable
amor a la estética, a la música que le sale por los poros todos los días de su
vida feliz. Un caballero a carta cabal que merece el agradecimiento y el
aplauso, por su papel trascendental en la historia de la difusión artística. ¡Gracias,
maestro, que siga la función!
Gabriel Echeverri González
Académico de Número 1 – Academia de
Historia del Quindío
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