Dos Casas de la Cultura del departamento, las de Montenegro y Calarcá, comparten varias particularidades que las convierten potencialmente en entidades irradiadoras de arte, así como en escenarios para la promoción de un turismo cultural. Modalidad esta que, después de los rigores del confinamiento, ha tenido auge en el panorama regional. Y además porque se ha incentivado el turismo de cercanías, que consiste en visitar los municipios cercanos a la capital del Quindío.
Llevan nombres de personalidades políticas, pues la de Montenegro nos recuerda a Marconi Sánchez Valencia y la de Calarcá a Lucelly García de Montoya, ambos muertos trágicamente.
Los dos personajes también fueron representativos en el mundo cultural de sus respectivos municipios y sus nombres en las entidades les otorgan reconocimiento especial. El más destacado hecho es el de Calarcá, como que la parlamentaria García de Montoya fue principal imulsadora en la causa que culminó con la creación de la sede cultural, mediante personería jurídica conseguida en marzo de 1971, hace 50 años.
Dos elementos de mucha trascendencia resaltan la importancia de las dos instituciones. El primero, muy desconocido, es la muestra arqueológica de Montenegro, donde se encuentra el objeto más antiguo de las poblaciones prehispánicas. Los arqueólogos lo llaman "punta de proyectil", es un pequeño artefacto de piedra fina que fue encontrado en una excavación en un predio rural del municipio. Se estima su edad en nueve mil años de antigüedad.
Por su parte, la Casa de la Cultura de Calarcá alberga el Museo Gráfico y Audiovisual, que había sido fundado por el recordado gestor cultural Luis Fernando Londoño, ya fallecido. En sus colecciones se encuentra - entre otros valiosos documentos - el conjunto de cédulas antiguas más numeroso del país.
Otra característica que une a las dos entidades culturales es poseer murales en madera del artista Orlando Londoño y varios murales figurativos de los símbolos locales.
Estas
condiciones, además del despliegue de procesos culturales diversos, convierten
a las dos Casas de la Cultura en espacios propicios para el naciente Turismo
Cultural. Sobre esta proyección, el recuento del cincuentenario de la
institución calarqueña, sobre las placas que rememoran personajes de la
cultura, y otros detalles, se ofrece una charla explicativa. Se realiza este
jueves 18 de noviembre en el auditorio de la Casa de la Cultura de Calarcá, a
las 9 de la mañana.
Por Roberto
Restrepo Ramírez.
Academia de Historia
del Quindío – Académico de Número 4
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