El libro Memorias del Camino del Quindío
en la época de la Independencia[1], fruto de una extensa investigación de Álvaro Hernando Camargo Bonilla de la Academia de Historia del
Quindío, y entregado solo el pasado 20 de julio en Filandia, es un documento
único e inapreciable que en adelante será una fuente obligatoria para quienes
se ocupan de este tema. La paciente y larga pesquisa del autor en muy
diferentes libros y archivos antiguos, deja muy en claro el papel que este
Camino cumplió en las diferentes épocas desde la Conquista hasta
nuestros días.
No hay ninguna duda: cuando los belicosos indios pijaos acosaban
y no dejaban que los viajeros y ejércitos españoles salieran para Popayán por
el camino de Guanacas, que iba por Neiva y La Plata hacia Ecuador y Perú, hubo
necesidad de encontrar otra vía posible que comunicara el oriente con el
occidente colombianos y así fue naciendo el Camino del Quindío como una
respuesta menos hostil a las comunicaciones de la época. Hoy en día el túnel de La Línea cumple una similar
función.
Poco a poco, lo que era una trocha de semovientes y de correos
incas (chasquis), se fue transformando en la más importante vía entre los dos sectores geográficos del país: por allí circularon
los ejércitos republicanos con Bolívar a la cabeza, los reconquistadores
españoles con Sámano, los viajeros extranjeros (ingleses, alemanes y franceses,
algunos de los cuales venían a espiar las condiciones de los americanos), los
frailes y curas que acompañaban a los colonos antioqueños y las tropas
liberales que acudían del Estado del Cauca a disputar los terrenos de los
conservadores en Manizales, entre otros. Muchas de las campanas, de los pianos
o sillas vienesas que adornaban las casas de los ricos de Cartago y Buga,
dejaron su huella en los hombros de los silleros o silleteros que cruzaban la
Cordillera de Los Andes.
Finalmente, en materia de ilustraciones este libro es una
novedad. Hay imágenes, dibujos, postales y fotos viejas y desvaídas que
refuerzan la calidad de los hechos que por aquí pasaron y muestran importantes
tramos de nuestra historia nacional. Pero el mensaje de Camargo Bonilla es que
los quindianos debemos reivindicar el Camino y he aquí una señal de que ya tenemos información útil para avanzar en la identidad
cultural que este proceso de relatarlo nos ofrece: la gestión de la
Gobernación, de la Secretaria y Fondo Mixto de Cultura, y de la Fundación Territorio Quindío han sido un paso muy importante en esa tarea identitaria con un
compromiso que es preciso destacar elocuentemente.
Publicado en El Sillero N° 2
Jaime Lopera Gutiérrez
Presidente de la Academia de Historia del Quindío
[1] Editado en Armenia, 2019. Publicación
reeditada que resume el proceso investigativo realizado por el Fondo Mixto de
la Cultura y las Artes del Quindío a través del proyecto Recuperación
de la memoria ecohistórica y cultural del Camino del Quindío,
concertado en el año 2009 con el Ministerio de Cultura y la Gobernación de
Quindío y ejecutado por la Fundación Territorio Quindío.
Descargar en pdf el documento: Memorias del Camino del Quindío en la época de la Independencia
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